Se localizan en la costa del Mar Este de Corea y sirven de hábitat y nido idóneo para las aves migratorias por su abundancia de recursos acuáticos, fáunicos y florales.
Con diversos tipos tales como lago extenso, desembocadura de ríos, vasto juncal, arrozal infinito, etc., que recuerdan un hermoso cuadro se observan al año las aves migratorias de más de 200 especies.
Las más representativas son las desembocaduras de los ríos Kumya y Tokji que afluyen en el Mar Este de Corea y tienen más de 2 mil hectáreas de superficie.
En esta región existen laguna, ciénaga, juncal, arrozal, salina y pantanos de variados tipos que tienen las mismas condiciones de zona marítima costera, todos favorables para el hábitat de aves acuáticas y la escala de las migratorias y abundan los peces incluyendo Cyprinus Carpio, Carassius auratus, animales acuáticos como marisco y camarón y recursos vegetales que crecen en pantanos como Zizania caduciflora, el junco y la espadaña.
Fue definida como zona de protección de las aves migratorias (pantano) de Kumya en 1995 (Juche 84).
Habitan allí regularmente más de 10 especies de aves que están en peligro de extinción y más de 20000 de aves migratorias, de las cuales Cygnus olor, Anser fabalis y Fulica atra alcanzan a más de un por ciento de sus especies globales o regionales, por lo que esta zona de protección fue registrada en la red de la ruta de paso de aves migratorias del Este de Asia a la Oceanía en 2018.
En marzo de 2021 hicieron escala allí más de cuatro mil Anser fabalis.
Durante el paso primaveral de cada año anidan miles de grúllas, cuyo número tiene el valor de protección internacional.
Cada año, en la primavera y el otoño, se pueden observar allí Platalea minor, Platalea leucorodia y Numenius madagascariensis que están en peligro de extinción a escala mundial, mientras habitan Charadrifonnes, aves muy raras en otros pantanos del Mar Este de Corea incluyendo Tringa erythropus, Tringa totanus, Numenius phaeopus y Himantopus himantopus.
Su playa extensísima se cubre de innumerables gaviotas tales como Larus argentatus, Larus canus, Larus hyperboreus, Larus cachinnans y Larus saundersi, esta última en peligro de extinción a nivel global.
A los pantanos de Kumya vienen cada año Anser albifrons y Anser fabalis que ocupan más de 7 y 3 por ciento de sus números regionales, respectivamente.
En la costa marítima invernan Clangula hyemalis, en peligro de extinción a nivel global, y Melanitta fusca, Melanitta americana y Mergus serrator que están en estado de alerta de desaparición.
La albufera Hapho con 12,5 km de perímetro y 4,3 kilómetros cuadrados de superficie abunda en peces, mariscos, camarones y otros recursos marítimos, por lo que sirve de hábitat de aves acuáticas de decenas de especies incluyendo Cygnus cygnus, Cygnus olor, Aythya ferina y Fulica atra.
En la orilla poco profunda del lago y los arrozales del contorno hacen escala normal las cigüeñas incluyendo Grus japonensis y Grus monachas durante la temporada del paso primaveral y otoñal.
Grus japonensis de allí se conserva como monumento natural.
El bosque de árboles bajos de los alrededores de Hapho es favorable para la reproducción de Anas poecilorhyncha, Chinese little, Gallicrex cinerea, Gallinula chloropus y otras aves acuáticas.
Allí invernan más de 5 por ciento de Cygnus olor y un por ciento de Cygnus cygnus que se observan regionalmente.
En febrero y marzo la laguna se llena de dichas aves hermosas, cuyo número tiene el valor de protección internacional, mientras en el invierno se cubre de Fulica atra y patos silvestres de distintas especies.
En los pantanos de Kumya y las montañas y campos de su contorno se pueden observar también diversos pájaros montañosos y campestres.
La RPDC dirige mucha fuerza a proteger y cuidar los pantanos a fin de enriquecer aún más el ambiente natural que constituye el nido de vida de las personas.