Quien creó la palabra “Orini” (niño) fue Pang Jong Hwan (1899-1931) que dio gran aporte a iniciar y desarrollar la literatura infantil moderna de nuestro país.
He aquí un extracto de su artículo: “Al niño, lo aprecien más que al adulto. Si este es la raíz, aquel es el brote.”
Pero su hermoso sueño e ideal quedaban durante largo tiempo solo como exhortación al pueblo coreano privado del país por el imperialismo japonés.
Su sueño se materializó por fin gracias a que el Presidente Kim Il Sung logró la liberación nacional el 15 de agosto de 34 de la era Juche (1945).
Él definió primero el Día de la Infancia, aunque había muchos días que celebrarse en la patria liberada y tomó la medida de festejar durante una semana la primera festividad de los niños después de la recuperación del país.
El 5 de mayo del 1946, con motivo del Día de la Infancia, él envió a todos los niños del país la carta “A los queridos niños de la nueva Corea” en términos siguientes: “Los niños son el tesoro de nuestro país. El futuro de Corea pertenece a nuestros niños. Ellos, un nuevo tipo de niños del nuevo Estado, que se encargarán del porvenir de nuestro país, tienen que estudiar y trabajar con entusiasmo, gozar de un recreo agradable y crecer lozanos.”
Su mensaje significativo fue la bendición afectuosa a los niños que se encargarían del porvenir de la nueva Corea y la declaración histórica que anunció el futuro brillante del país adueñado por el pueblo.