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Entre los intelectuales que contribuyen con la ciencia y la tecnología al fortalecimiento y la prosperidad de la patria se encuentra Yu Son Ok, jefa de la sala del Instituto de Botánica de la Academia Estatal de Ciencias.
A mediados de la década de 1980, cuando trabajaba como profesora de la cátedra de veterinaria y zootecnia en el entonces Instituto Superior de Agricultura de Sukchon, Son Ok inició el estudio sobre productos bioquímicos, una rama desconocida.
En aquel tiempo, en los campos sufrían gravemente daños por plagas e insectos.
Se redujo la producción de cereales y la fertilidad de la tierra debido a la aplicación de productos agroquímicos, causando la preocupación de los campesinos.
Yu Son Ok decidió solucionar este asunto personalmente. Pero en los documentos de aquel entonces no había métodos para eliminar las plagas y los insectos nocivos, excepto los productos agroquímicos.
Tras incansables reflexiones para encontrar el método de conservar la fertilidad de la tierra y, al mismo tiempo, eliminar las plagas, percibió la idea de que como los animales tienen capacidad de proteger por sí mismo desde el ataque del enemigo natural, también las plantas poseerían tal función.
Con esa idea ella se dedicó a esclarecer las características elementales de las plantas.
Siempre le faltaba el tiempo para realizar la labor docente y la investigación, de ahí por lo que se acostumbró a dormir dos horas al día.
Dejando atrás los quehaceres domésticos que esperan sus manos, recorrió montes y campos y vivió en la sala de investigación analizando los elementos de más de mil especies de plantas.
A base de esto, recolectó más de 200 plantas capaces de exterminar las plagas e insectos dañinos y se enfocó en la elaboración de agroquímicos vegetales.
Tras repetidos fracasos, por fin elaboró la insecticida vegetal “Myongrok” capaz de eliminar las plagas e insectos nocivos de más de 80 variedades.
Este producto disfrutó de buena reputación entre los campesinos.
Pero, no satisfizo con su éxito ya alcanzado.
Unos años después inventó “Myongrok-3”, que tiene adicionalmente la función de desinfectar las semillas.
En 201 (99 de la era Juche) logró elaborar el activador biológico natural utilizando los recursos biológicos del país.
El nuevo activador que contiene armoniosamente unos 350 elementos nutritivos y sustancias orgánicas, ayuda a las plantas agrícolas al absorber nitrógeno en el aire y elementos nutritivos necesarios para el crecimiento por lo que eleva considerablemente el rendimiento de la cosecha.
En el 2017 (106 de la era Juche) la Organización Mundial de la Propiedad Intelectual reconoció este activador como un abono orgánico compuesto, verde natural sin contaminación ambiental de nivel mundial y otorgó las medallas de invención a Yu Song Ok y los miembros de su colectivo investigativo.
Hasta la fecha ella inventó 9 productos bioquímicos y entre ellos, los 4 recibieron la patente del país.
Por su mérito mereció el título de Científico Benemérito y el Premio de Ciencia y Técnica 16 de Febrero, máximo galardón para los científicos.
Aunque lleva 65 años de edad, Yu Son Ok sigue el camino de investigación científica.
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