En distintas partes de la RPD de Corea se despliega un intensa campaña para bloquear la penetración de la epidemia.
La provincia de Hwanghae del Sur presta primordial atención a prevenir el nuevo virus y, en particular, intensifica la labor política, propaganda higiénica y servicios profilácticos en las zonas cercanas a la línea divisoria.
La ciudad de Haeju distribuye con rapidez materiales explicativos a las fábricas, empresas y otras unidades y exige a sus trabajadores utilizar máscaras en cualquier momento y lugar.
Consciente de que la epidemia puede transmitirse por los ríos, mares, aves y animales, ha establecido un sistema según el cual los ciudadanos informan con prontitud de los fenómenos anormales a los órganos correspondientes e intensifican la educación y control para que los lugareños no hagan ilegales prácticas de recoger moluscos y pescar.
Ha incrementado el número de puntos de análisis del agua a más de diez, exige que la empresa de acueductos, alcantarillados y calefacción realice regularmente el análisis de la calidad del agua y toma medidas para depurar aguas residuales según el reglamento.
Kyonghung y otros distritos de la provincia de Hamgyong del Norte realizan sustancialmente en diversas formas y métodos la propaganda higiénica y demanda a sus habitantes tomar agua hervida.
La provincia de Phyong-an del Sur y la ciudad de Nampho concentran todos sus esfuerzos en la campaña antiepidémica.