En Mangyongdae, en el municipio del mismo nombre en Pyongyang, se halla la casa natal del Presidente Kim Il Sung (15 de abril de 1912).
Según dicen, desde la antigüedad Mangyongdae fue renombrado por su hermoso paisaje. La colina más alto del lugar se llama Mangyong por poder contemplar desde allí diez mil paisajes encantadores. De ahí también el nombre de la aldea Mangyongdae.
En este lugar está conservada hasta la fecha una choza donde nació y pasó su infancia el Presidente.
Su bisabuelo Kim Ung U muy pobre había conseguido esta cabaña con el compromiso de guardar el monte y las tumbas de la familia de un terrateniente que vivía en Pyongyang.
Él desempeñó un papel importante en las luchas para hundir y rechazar los buques norteamericanos “Sherman” y “Shenandoah” que agredieron a Corea a mediados del siglo XIX. Los abuelos del Presidente eran también patriotas que ayudaron activamente a sus descendientes en sus labores revolucionarios, aunque vivían muy pobres arrendando las tierras ajenas.
En esa casa nacieron el padre Kim Hyong Jik, destacado dirigente del movimiento antijaponés de liberación nacional de Corea, el tío Kim Hyong Gwon, el hermano menor Kim Chol Ju que se sacrificaron en la lucha por la independencia del país, así como los primos.
Allí se conservan la mesa y el recipiente para preparar tinta china utilizados por el Presidente para el estudio, el armario, brasero, vajillas, aperos agrícolas, telar manual, rueca, estera y otros utensilios usados por sus familiares. La tinaja torcida testimonia la difícil situación económica de la familia del Presidente.
Aun en tales condiciones, sus abuelos y padres prestaron profunda atención a la educación para que el Presidente heredara la tradición patriótica de la familia de Mangyongdae que se consagraba en aras de la patria y la nación.
En el lugar se encuentran los lugares de sirum (lucha coreana) y de estudio, donde el pequeño Kim Il Sung cultivó el odio al imperialismo japonés y el espíritu patriótico, así como la roca-buque que utilizó en el juego militar.
Kim Il Sung abandonó su tierra natal junto con sus padres que se dedicaban a la lucha por la independencia del país, y en marzo de 1923 cuando cumplía 12 años de edad, regresó solo a Mangyongdae viajando mil ríes desde la región noreste de China para experimentar en carne propia la realidad de Corea. Durante su estudio en la escuela Changdok, recibió en enero de 1925 la noticia de que su padre fue arrestado por la policía, y partió de inmediato de la casa con el gran juramento de no regresar a su tierra natal antes de recuperar al país.
Él condujo a la victoria la ardua lucha armada antijaponesa que duó 20 años y por fin logró la liberación del país (15 de agosto de 1945).
Después de haber retornado a la patria, se entregó a la construcción de una nueva Corea. Acudió a la Aceria de Kangson (actual Complejo de Acero de Chollima), fundó el Partido del Trabajo de Corea (10 de octubre de 1945), organización orientadora de la sociedad de Corea, y participó en el mitin multitudinario de Pyongyang (14 de octubre de 1945), antes de ir a su tierra natal.
Al ver al Presidente, su abuela salió descalzada al patio y lo abrasó con lágrimas en su rostro, preguntando por qué había venido solo sin sus padres. Él fue el único que regresó entre los familiares que habían salido de esa casa.
Mangyongdae es un lugar sagrado de la revolución que visitan no solo el pueblo coreano, sino también los extranjeros que veneran al Presidente Kim Il Sung, los partidarios de la idea Juche y los aspirantes a la independencia.
Este año se cumple el aniversario 110 del natalicio de Presidente Kim Il Sung.