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La cumbre de Hanoi acaba sin firmar un acuerdo al contrario de la cumbre de Singapur. Por el lado estadounidense se sigue pidiendo la desnuclearización y destrucción de armas nucleares incondicional. Sin embargo, y atendiendo al acuerdo de Isla Sentosa, la administración de Donald Trump no ha hecho absolutamente nada de lo acordado en dicha cumbre. El sistema THAAD sigue en el sur de la península coreana así como las cabezas nucleares tácticas del ejército estadounidense.
Por la parte de la RPDC se repatriaron los cuerpos de soldados caídos estadounidenses en la guerra y se ha desmantelado el sitio de pruebas nucleares de Punggye-ri y no ha habido pruebas nucleares. Tres pruebas materiales que hacen patente el deseo de paz por la parte coreana y que no quede en papel mojado. El deseo de paz viene ya de hace muchos años. Cada cierto tiempo se ha mandado declaraciones de paz a EEUU y este siempre se ha negado a firmarla.
Por la parte estadounidense se aseveró que no se retirarán las sanciones hasta la “completa desnuclearización de la península coreana” y que no se endurecerán las sanciones debido a que ya son “muy fuertes”. Dijo el presidente Donald Trump.
Por último, y parafraseando a Donald Trump, dice que se retiró (unilateralmente) porque “Kim me pidió que retirase todas las sanciones”.
