El 3 de noviembre de 1946 (35) tuvieron lugar las primeras elecciones democráticas en Corea.
Bajo la ocupación militar del imperialismo japonés (1905-1945) los coreanos llevaron una vida de esclavitud colonial sin poder quejarse de sus condiciones lamentables y no pudieron expresar libremente sus opiniones durante largo tiempo.
Una vez liberado el país (el 15 de agosto de 1945), ellos se convirtieron en sus auténticos dueños y pudieron participar en el sufragio para establecer el Poder
Al respecto un periódico de ese tiempo transmitió: “Tanto los viejos como las mujeres y niños, reunidos, hablan de las elecciones que se acerca o del General Kim Il Sung que es nuestro candidato. No tuvieron ningún tema de conversación noble y familiar como este, ni una oportunidad para discutir sobre la política. ¡Cuán felices y orgullosos se sienten los habitante de esta región que en reflejo de su voluntad eligen al General Kim Il Sung, máximo patriota y dirigente de la nación! Es natural que ellos no concilien el sueño en la noche.”
El día de las elecciones, el Presidente Kim Il Sung votó a un candidato obrero. En las elecciones de los miembros de los comités populares provinciales, urbanos y distritales el 99,6 % del electorado acudió a las urnas y se concluyeron exitosamente las primeras elecciones democráticas realizadas a votación secreta sobre la base del principio general, igual y directo.
Desde entonces el pueblo coreano disfruta plenamente de la libertad política y ejerce sus derechos como dueño del país. Los ciudadanos de más de 17 años de edad se incorporan en la vida estatal y social con el derecho a elegir o ser electos sin distinción de su sexo, profesión, residencia y nivel de conocimientos.
Cuando se celebran las elecciones, todos los habitantes se dedican con el fervor político al empeño para consolidar el poder popular.
En las XIV elecciones de diputados de la Asamblea Popular Suprema de la RPDC que tuvo lugar en marzo pasado participó el 99,99 % del electorado excepto los que se encontraban en el extranjero o trabajaban en alta mar, y todos ellos votaron a favor a los candidatos. Fueron elegidos 687 candidatos de todas las clases y capas a los diputados de la APS.
El director de una compañía noruega que presenció el sufragio en Corea expresó: Me produjo una gran emoción el hecho de que los trabajadores como obreros, campesinos e intelectuales pueden ser electos a los diputados que determinan los asuntos estatales. De veras, es superior el sistema electoral de la RPDC en que los habitantes pueden manifestar libremente sus voluntades.