Entre las herencias culturales nacionales que el pueblo coreano creó y desarrolló desde tiempo remoto existe la costumbre de uso de cuchara.
La cuchara de hueso animal perteneciente al Neolítico descubierta en las reliquias de Sophohang de la ciudad de Rason y otras hechas de huesos o cuernos animales desenterradas en los vestigios de la edad de Bronce, comprueban que la nación coreana tiene una larga historia de uso de cucharas.
La cuchara coreana es delgada en su centro cóncavo, un poco gruesa en su borde y larga en su mango para que la comida se lleve fácilmente a la boca por entre los labios.
Los materiales y formas utilizados en la fabricación de cuchara fueron perfeccionados de manera plástica y útil con oro, plata, porcelana, latón y otras materias, de acuerdo con el gusto y la costumbre de vida alimentaria de los coreanos.
El uso de cucharas tiene que ver con el hecho de que nuestro pueblo prefería comidas muy jugosas como la sopa, caldo y kimchi.
Tuvo el hábito de tomar comidas con sopa en su vida alimentaria. Habitualmente, preparó comidas en la mesa y las tomó con cuchara como principal utensilio.
Utilizó cucharas acordes a ciertos métodos y morales.
Cuando comían con miembros de la familia, consideraron como un moral comenzar a tomar comidas después que los padres o mayores cogieran cucharas. Cuando comía con un huésped, el anfitrión cogía la cuchara primero y le ofrecía comidas, y para terminar, este dejaba la cuchara después que el huésped acababa de comer.
Un comerciante alemán que estaba de visita en nuestro país en el siglo XIX escribió en su libro intitulado “Viaje por Corea” que a diferencia de los chinos, los coreanos tomaban comidas con cucharas y que esto se veía muy elegante y agradable.
Esta costumbre continúa hasta hoy.