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Toda la provincia de Kangwon está envuelta por el gran júbilo de haber celebrado con solemnidad la inauguración de la central hidroeléctrica Ejército-Pueblo de Hoeyang bajo la presencia del estimado camarada Kim Jong Un.
Se ofreció el día 20 en el Teatro Artístico de la Provincia de Kangwon la función artística «Nuestro Mariscal y la población de la provincia de Kangwon» en felicitación de la inauguración de las 6 plantas hidroeléctricas recién construidas.
La sede de la gala artística estaba repleta de los habitantes de la provincia que vieron al gran Padre en la planta hidroeléctrica en la región montañosa.
Se distinguieron entre los espectadores los directivos del Consejo de Ministros y los ministerios, los secretarios jefe de los comités partidistas provinciales y los presidentes de los comités populares provinciales, así como los funcionarios y trabajadores de la provincia.
Recogiendo la unánime alma de todos los habitantes locales, en la escena de la función iniciada con la poesía y coro «Añoranza«, los intérpretes expresaron el sentimiento de agradecimiento al Secretario General del Partido del Trabajo de Corea, Kim Jong Un, quien dirigió todo el proceso de la construcción de nueva base energética, aunque estaba atareado por los múltiples asuntos estatales, y concedió todo el honor a la población provincial.
Cantaron aquellos días inolvidables en que los constructores levantaban con propias fuerzas una nueva riqueza de eterna duración por la prosperidad de la patria, dando prueba de su amor a la patria y su espíritu revolucionario de autosuficiencia y autodeterminación.
Conmovieron al público las piezas que muestran el poderío inagotable de la gran unidad cívico-militar que fundamenta la revolución y la sociedad.
A través de la función apasionante, los espectadores sintieron de corazón el mundo espiritual de los creadores del espíritu de la provincia de Kangwon quienes adelantan con propias fuerzas el radiante futuro poniéndose al frente de la campaña por la materialización de las políticas partidistas con la firme convicción de que la idea y lineamientos del Partido son precisamente la verdad y la victoria.
La canción «Somos coreanos» demostró el gran orgullo del pueblo coreano más fuerte en el mundo y protagonista de la más gloriosa época de Kim Jong Un, que vive en la década de grandes milagros avanzando vigorosamente por el camino de prosperidad, inexplorado por nadie, y registrando creaciones y cambios de siglo con sus propias fuerzas.
La función manifestó la férrea voluntad de los moradores de Kangwon de seguir ostentando el honor valioso de la provincia ejemplar en materialización de las políticas partidistas, y el de creadores del espíritu de la época, en el camino de glorificar para siempre y con el poderío de autoconfianza el Estado socialista bajo la dirección del camarada Kim Jong Un.
