Desfile militar por el aniversario del Partido del Trabajo de Corea

En el trayecto de la lucha por cumplir la más justa misión y realizar el ideal ambicioso encargándose del destino de la patria y pueblo, están registradas las 8 décadas llenas de victorias del Partido del Trabajo de Corea que tiene la historia más larga en el poder socialista del mundo.

El PTC ha conducido a la senda de la victoria la gran empresa por el país próspero y el ejército poderoso heredando de manera pura y perfecta el ideal y espíritu de la generación fundadora y ganando el apoyo y confianza absolutos de las masas populares.

Su trayecto de 80 años constituye un monumento glorioso impregnado de las proezas imperecederas de haber situado en la cima del siglo el prestigio y nombre del gran Estado y pueblo con su idea revolucionaria y liderazgo excepcionales.

Tuvo lugar con solemnidad el día 10 en la Plaza Kim Il Sung la parada militar en homenaje del 80º aniversario de la fundación del PTC.

En las carreteras extendidas hacia la Plaza, estaban enfiladas las formaciones de marcha a pie inclusive las de todos los tipos y armas de las fuerzas armadas de la República, y las columnas de armamentos sofisticados.

Entró la orquesta del prestigioso Coro Estatal Benemérito, encargada de la interpretación de la parada.

Como preludio del acto, se efectuó la ceremonia de cortesía del grupo de bandas militares que conmovió al público con las melodías rítmicas e impetuosas de las canciones militares revolucionarias.

Después de diferentes formaciones rítmicas de la banda militar y los movimientos peculiares de los espadachines militares, demostraron sus habilidades las tocadoras de tamboriles y los guardias de honor.

Terminada la ceremonia de la banda militar, entraron gallardamente las formaciones de parada en la plaza adornada con iluminaciones fantásticas.

En los rostros de los militares con armas se reflejaba el ímpetu del ejército poderoso que obedece incondicionalmente a la idea y dirección del Comité Central del Partido y lo defiende a riesgo de la vida.

Luego, entraron los estandartes de las unidades combinadas de todos los niveles del EPC.

En los estandartes está registrado el  orgullo del ejército que ha logrado siempre victorias y milagros legendarios enarbolando la bandera roja del PTC y cumpliendo satisfactoriamente con su misión como ejército del partido y el líder.

Se efectuó la ceremonia de la guardia de honor del Ejército Popular de Corea para recibir al Jefe de Estado.

El estimado camarada Kim Jong Un, Secretario General del PTC y Presidente de Asuntos Estatales de la República Popular Democrática de Corea, pasó revista a la guardia de honor del Ejército Popular de Corea y los estandartes de las unidades combinadas de todos los niveles.

El camarada Kim Jong Un fue acogido cortésmente por los miembros de mando del Ministerio de Defensa Nacional y los comandantes militares y políticos de tipos de ejército y grandes unidades combinadas del EPC.

En medio de la interpretación de la música de bienvenida, el camarada Kim Jong Un salió a la tribuna junto con los jefes de partido y gobierno de varios países.

Estallaron las estruendosas aclamaciones «¡Viva!» y se lanzaron los fuegos artificiales en el cielo nocturno de la fiesta de octubre.

El Secretario General respondió cordialmente con su mano alzada a las aclamaciones de los participantes en el desfile militar y los espectadores.

Entraron en la tribuna los miembros del Presidium del Buró Político del CC del PTC y otros cuadros del partido y el gobierno, los secretarios jefe de los comités partidistas provinciales, los miembros de mando principales de la capa militar y los jefes de los grupos de felicitación de coreanos residentes en ultramar.

También tomaron asientos ahí los cuadros veteranos que trabajaron largo tiempo en los importantes cargos del Estado.

Se distinguían en los asientos para invitados los participantes en las festividades del aniversario 80 de la fundación del PTC, los miembros de las delegaciones de partido y gobierno de varios países en visita de felicitación a la RPDC, entidades democráticas internacionales y organizaciones de estudio de la idea Juche, los representantes diplomáticos acreditados en la RPDC, los familiares de las personas relacionadas con la lucha armada antijaponesa en el extranjero, y los huéspedes extranjeros.

Los miembros de la Organización de Niños de Corea entregaron ramos de flores al estimado camarada Kim Jong Un y a los jefes de partido y gobierno extranjeros.

Se efectuó la ceremonia de izar la bandera nacional de la RPDC.

Recibiendo el saludo de los estandartes de las unidades combinadas a todos los niveles del EPC, la escolta de bandera nacional se dirigió al asta con pasos solemnes.

Mientras resonaban las melodías del himno nacional de la RPDC, se izó la sagrada bandera nacional en el cielo de la Plaza Kim Il Sung.

En señal de felicitación por el aniversario 80 de la fundación del PTC, se dispararon 21 salvas haciendo recordar su trayecto de 80 años coronado con las victorias, glorias, creaciones e innovaciones.

El Secretario General del PTC pronunció un discurso histórico.

Ante todo, el Secretario General felicitó calurosamente a los huéspedes de todas las clases y capas y los íntimos amigos de varios países que fueron invitados al desfile militar.

También extendió las felicitaciones a todo el pueblo del país, que hizo ingentes esfuerzos creativos y laborales y dedicó devociones sinceras para el octubre de glorias, y a los oficiales y soldados del EPC y los participantes en la parada militar.

Evaluó altamente la proeza más distinguida del EPC que defendió al Partido y el linaje de la causa revolucionaria mediante la lucha ensangrentada en los anales de la revolución conducidos por el PTC y cumplió de modo más activo la dirección del Partido.

Y manifestó su más alta consideración a los mártires antijaponeses y veteranos, que son la sagrada generación fundadora de nuestras fuerzas armadas revolucionarias, y a los veteranos de guerra y los oficiales y soldados de las generaciones predecesoras que apoyaron la idea y causa de nuestro Partido en todas las décadas de la revolución, dando prueba de su espíritu patriótico y librando la lucha heroica.

También en la lucha de siguiente etapa, nuestro ejército debe glorificar como hoy la cualidad y honor de las tropas élites impregnadas de la idea y voluntad del PTC, el destacamento poderoso que siempre sale victorioso y la patrulla que abre la brecha en la construcción socialista, dijo y exhortó encarecidamente a luchar con más vigor por la victoria eterna de la RPDC y el pueblo coreano y por la invencibilidad del EPC y su honra brillante bajo la guía del PTC.

Terminado el discurso del Secretario General, estallaron los vítores entusiastas de los oficiales y soldados del EPC decididos a poner en pleno juego el indoblegable espíritu de combate al frente de la revolución bajo la guía del gran Comandante genial quien se consagra por la dignidad y el honor de la patria y por la prosperidad y felicidad eternas del pueblo.

Acto seguido, se realizó la revista de los preparativos de la parada.

El general de ejército No Kwang Chol, ministro de Defensa Nacional de la RPDC, dio parte al mariscal Pak Jong Chon, vicepresidente de la Comisión Militar Central del PTC, para que él revisara los preparativos de la parada.

Tras revisar las unidades de desfile, el mariscal Pak Jong Chon lo informó con cortesía al Secretario General del PTC.

El general de ejército No Kwang Chol se puso al frente de las columnas de desfile de las fuerzas armadas de la RPDC.

Avanzó la columna representante del séptimo regimiento de O Jung Hup llevando los retratos de los combatientes revolucionarios antijaponeses que con absoluta fidelidad y confianza al líder crearon la tradición de defensa a ultranza al líder.

En el bloque que representaba las unidades guardia de la Guerra de Liberación de la Patria se veían los retratos de los comandantes de la Guerrilla Antijaponesa y los héroes del período de la Guerra de Liberación de la Patria, quienes crearon el mito de victoria desconocido por la historia mundial de guerras en apoyo del propósito operacional del gran Líder.

Las formaciones representantes de la División Guardia Motorizada 105 «Seúl» y de las unidades galardonadas con el título de Séptimo Regimiento de O Jung Hup en el período de la Marcha Penosa desfilaron con pasos firmes con los retratos de los comandantes fieles quienes hicieron una distinguida contribución a defender firmemente la idea y autoridad del líder en cada década severa de la revolución en que había de superar las dificultades inauditas y fatales.

Seguido a ellas, entraron en la plaza las formaciones de la caballería de honor, el Departamento de Escolta del Comité Central del Partido, el Departamento de Escolta del Comité de Asuntos Estatales y otras guardias de corps.

Luego, aparecieron las formaciones del colectivo militar encargado de defender inexpugnablemente la frontera meridional de la patria que marchaban con los estandartes de los cuerpos, divisiones y brigadas cuyos nombres estremecen a los enemigos sólo cuando los oyen.

Al frente de esas columnas, se encontraban sus comandantes con las espadas en su mano.

Con los comandantes de distintas tropas a la cabeza, dieron sus enérgicos pasos las formaciones de las fuerzas navales y aéreas.

Las columnas de las fuerzas estratégicas equipadas con armas nucleares de autodefensa y las otras de las tropas de operación especial, fortalecidas como potentes colectivos de batalla, estaban muy animadas por el fervor combativo de dar una derrota inimaginable y deplorable a los enemigos en el momento del combate decisivo.

Se resaltaban a la vista las formaciones de la unidad de acciones en los montes de la retaguardia enemiga, reconocida como puñal que apunta el corazón de los enemigos, y el batallón de desembarco y asalto capaz de burlar cualquier línea de defensa.

Se distinguía la formación de las unidades de operación en el exterior que crearon nueva historia del EPC y manifestaron plenamente el temple de coreanos con su valentía combativa y méritos legendarios, mostrados en la operación militar en el extranjero en aras de defender el honor y dignidad de la patria.

El Secretario General envió un saludo combativo a las unidades selectas que defienden con firmeza la sagrada soberanía de la RPDC y el honor del pueblo coreano con lealtad absoluta al Partido y la valentía incomparable.

Los militares reunidos dieron efusivos vítores al Comandante de acero quien con su original idea sobre la construcción de un ejército poderoso de una nueva era y su distinguido arte de mando militar fortaleció el EPC como destacamento combativo de flor y nata capaz de vencer en lo ideo-espiritual y técnico-militar a cualquier enemigo poderoso.

Avanzaron impetuosamente las columnas de los cuerpos que se encargan de la defensa de la capital Pyongyang y defienden con seguridad las costas de la patria y la profundidad de la retaguardia, y el bloque de la Dirección General de la Guarnición Fronteriza.

Se podía leer la voluntad de aniquilar a los enemigos en las formaciones de la división de tanques y carros blindados y de la división de infantería motorizada, consideradas como fuerte puño de hierro de las fuerzas terrestres dotadas de elevada movilidad y capacidad de ataque, la de la Dirección General de Exploración e Inteligencia, la de francotiradores, la de soldados de transmisiones y otras de uniformados especialistas y guardias.

Pasaron por la Plaza las filas de la Academia General Militar Kim Il Sung, la Academia Militar Política Kim Jong Il, la Academia Militar Política Kim Il Sung y la Universidad de Defensa Nacional Kim Jong Un.

Les siguieron los bloques de las academias militares a todos los niveles tomando la decisión de garantizar la grandeza e invencibilidad de las fuerzas armadas revolucionarias.

Las formaciones del Ministerio de Seguridad Estatal, el Ministerio de Seguridad Pública y el grupo móvil especial para la seguridad pública manifestaron la única voluntad de defender confiablemente al líder, el régimen y el pueblo.

Los espectadores dieron las fervientes felicitaciones y aplausos a las columnas de los integrantes de las escuelas revolucionarias que se preparan firmemente como herederos del linaje original de la revolución coreana.

Apareció la columna de la Academia de Ciencias de Defensa Nacional que asegura el desarrollo inagotable del poderío defensivo del Estado y la modernización del ejército potente poniendo en juego la infinita fidelidad al partido y el firme espíritu revolucionario, la mejor capacidad científica y técnica y el indoblegable temperamento de creación.

Las filas del Ejército Rojo Obrero-Campesino y de la Guardia Infantil coronaron con su marcha dinámica el fin de la marcha a pie demostrando que el poderío de nuestro Partido y Estado se debe a contar con las poderosas fuerzas armadas civiles junto con el invencible ejército regular.

Comenzó la marcha de las formaciones mecánicas, fruto de la defensa nacional autodefensiva construida por el Partido que trajo un salto vertiginoso impulsando sin cesar el fortalecimiento del poderío defensivo en el severo mundo de hoy en que el destino del Estado y pueblo se decide por la fuerza.

Pasaron las formaciones de «Chonma-20«, tanque principal dotado de la gran capacidad ofensiva y del sistema de defensa confiable, y cañones obuses autopropulsados calibre 155mm que muestran la potencialidad de las artillerías que son primera arma del ejército coreano.

Al aparecer los sistemas medulares de armas ofensivas de nueva generación capaces de atacar con precisión los blancos principales del enemigo y la formación de lanzacohetes calibre 600mm que es el arma de punta coreana, única en el mundo, las masas dieron aclamaciones con efusivos aplausos.

Los armamentos modernos reflejan la clarividencia, la decisión resuelta, la convicción férrea y la abnegación del Partido que después de la liberación dio atención primordial a consolidar la base de la industria bélica por la dignidad y tranquilidad de la patria y pueblo, y por la paz genuina.

Acto seguido, avanzaron las formaciones de misiles cruceros estratégicos de largo alcance, lanzaderas de drones y misiles tierra-aire y tierra-tierra haciendo gala de la inagotable potencialidad de la tecnología de defensa nacional de nuestro Estado y su vertiginosa velocidad de desarrollo a que no puede despreciar nadie en el mundo.

Entraron en la plaza los sistemas de armas estratégicas que forman parte medular de la capacidad de autodefensa nacional que nuestro partido ha venido aumentando ininterrumpidamente para defender sus derechos a la subsistencia y desarrollo y la paz.

A continuación, pasaron la formación del sistema de misil con ojivas de planeo hipersónico y la de misiles estratégicos hipersónicos de alcance intermedio

La parada militar llegó al clímax con la aparición del ICBM «Hwasongpho-20«.

Todos los participantes dirigieron la máxima gloria y gratitud al camarada Kim Jong Un, gran revolucionario, patriota sin par y general legendario quien al conducir la causa patriótica por la defensa de la soberanía, los intereses de desarrollo y la prosperidad eterna de las generaciones venideras, abre una nueva era dorada de Corea heroica donde se cumple satisfactoriamenteel trabajo por un país próspero y un ejército poderoso.

Terminado el desfile militar, volvió a estallar las aclamaciones de «¡Viva!» y se dispararon los fuegos artificiales.

El camarada Kim Jong Un respondió cordialmente a las masas.

En la Plaza anidaban la gran reverencia al PTC con orgulloso trayecto de 80 años y el sentimiento ideológico de todo el pueblo de realizar todos sus sueños y acoger todas las glorias sólo bajo la guía del PTC.

El desfile conmemorativo del 80º aniversario de la fundación del PTC se registrará eternamente en la historia como gran festival político y militar que manifestó a todo el mundo que el PTC, entidad política del gran camarada Kim Jong Un, garantiza la dignidad y prestigio inmortales de nuestro Estado y la vida y futuro heroicos del pueblo coreano, así como la fama y victorias de nuestro ejército.

También, se anotará como evento histórico que ha dado a conocer la voluntad inconmovible del ejército y pueblo coreanos de apoyar por unanimidad y hasta el fin la causa del partido.