Ofrecida función festiva a los militares de unidades de operación en extranjero del EPC

Tuvo lugar con solemnidad en la Casa Cultural 25 de Abril la función para los comandantes y combatientes de las unidades de operación en extranjero del Ejército Popular de Corea  que realizaron indelebles proezas en la sagrada batalla por defender la dignidad y honor de nuestra patria poderosa.

En el lugar de la gala artística dominaba la infinita reverencia y el ferviente elogio a los soldados valientes participantes en el combate que ostentaron a todo el mundo el coraje de los coreanos y el inmortal nombre de nuestro ejército que siempre salen victoriosos sin doblegarse ante la injusticia, dando prueba de la peculiar superioridad ideológica y espiritual de sostener fielmente a la dirección del PTC, la valentía incomparable y el espíritu de sacrificio patriótico.

El estimado camarada Kim Jong Un, Secretario General del PTC y Presidente de Asuntos Estatales de la RPDC, presenció el espectáculo junto con los comandantes y combatientes.

Al llegar a la sede de la función, el camarada Kim Jong Un depositó un ramo de flores ante la pared memorial en el hall central y rindió sublime homenaje a los mártires participantes en los combates que estarán siempre en la memoria de la patria y el pueblo.

Se transmitirá de generación en generación la conducta patriótica de los uniformados que en la operación militar en extranjero demostraron a todo el mundo el poderío del EPC, dijo y se fotografió con los comandantes principales que condujeron con habilidad las unidades a la victoria.

Entre los espectadores se veían los familiares de los mártires caídos en el combate, los funcionarios del Comité Central del Partido, los miembros de mando del Ministerio de Defensa Nacional, los comandantes militares y políticos de las grandes unidades combinadas del EPC, los funcionarios de ministerios, órganos centrales y la ciudad de Pyongyang y los trabajadores capitalinos.

Cuando el camarada Kim Jong Un salió al palco, todos los participantes le acogieron con vítores a este genial comandante de acero quien formó a nuestro ejército popular como las fuerzas armadas revolucionarias más poderosas del mundo, que vencen en lo ideológico y espiritual y en lo militar y técnico a cualquier enemigo fuerte, y lo presenta orgullosamente ante la época.

Los ejecutantes pusieron en la escena las canciones a la patria madre que los combatientes no olvidaban ni un momento y otros cantos militares revolucionarios para expresar el sublime homenaje a los héroes combativos de la época de Kim Jong Un quienes con los méritos legendarios exaltaron la fama de la patria y crearon un ejemplo excelente del indoblegable coraje heroico y espíritu combativo de nuestro ejército.

Las piezas que elogian la fidelidad y el espíritu patriótico de los héroes que dedicaron su vida sin vacilación alguna para nuestro gran Partido, el poderío eterno de nuestro gran Estado y la tranquilidad y felicidad de nuestro gran pueblo, describieron con emoción que los notables éxitos del EPC logrados en el combate son la conquista de la gran batalla ideológica, noble tradición de la Revolución Coreana que con la idea se inició y siempre salió victoriosa.

Estaban muy emocionados los espectadores viendo un multimedia que da a conocer las proezas de los soldados valientes que verificaron con el mito de batalla sin precedentes la verdad de que la paz se preserva sólo por la fuerza absoluta y el representante de la justicia debe poseer debidamente la capacidad de aniquilar resueltamente a la injusticia de toda índole, y que demostraron mediante su opción heroica el objetivo y modo de la vida de los militares coreanos para la patria

Escuchando las canciones «Estrellas de la patria«, «Recordaremos» y «Sólo por la victoria«, que hacen evocar a los soldados participantes en los combates, los espectadores recordaron a los soldados indoblegables que aman tanto a su patria y atemorizaron a los enemigos desplegando el heroísmo masivo y el incomparable espíritu de sacrificio, nunca oídos ni vistos en otros ejércitos y quedando fieles al llamamiento de la patria.

Arrancó efusiva ovación de los espectadores la función alusiva a la férrea convicción y el indoblegable temple de los oficiales y soldados coreanos de escribir de continuo la historia heroica desplegando más plenamente el espíritu heroico de las generaciones fundadora del ejército y triunfadora de la guerra en la nueva época de la construcción del ejército poderoso en que nuestras fuerzas armadas revolucionarias acogen la era más dorada de su desarrollo.

Una vez terminada la función, estallaron otra vez estruendosas aclamaciones hacia el camarada Kim Jong Un.

Éste tomó una tras otra las manos de los militares participantes en los combates que le vitorean.

La función demostró el infinito elogio del partido, la patria y el pueblo a los soldados heroicos que glorificaron con la victoria la gran era de Kim Jong Un y el orgullo y la gloria de tener al ejército invencible y poderoso.