Quedó rubricado un tratado interestatal sobre la asociación estratégica e integral entre la República Popular Democrática de Corea y Rusia bajo los principios de igualdad, respeto a la soberanía, buena vecindad y beneficios mutuos.
El estimado compañero Kim Jong Un, Secretario General del PTC y Presidente de Asuntos Estatales de la RPDC, y el Presidente ruso, Vladimir Vladimirovich Putin, firmaron el día 19 el “Tratado sobre la asociación estratégica e integral Corea-Rusia“.
En la ceremonia tomaron parte cuadros dirigentes de ambos países.
Cuando los dignatarios intercambiaron el documento tras firmarlo, todos los felicitaron con fuertes aplausos.
Kim Jong Un se fotografió con Putin para dejar la constancia de la rúbrica de un documento histórico que se registrará con letras mayúsculas en la historia de las relaciones bilaterales.
Acto seguido, ambos publicaron un comunicado conjunto al respecto.
Kim Jong Un hizo referencia a la firma con el Presidente ruso de un tratado que se recordará eternamente en la historia de desarrollo de la amistad Corea-Rusia, expresando su gran emoción por compartir el lugar con los rusos, compañeros de armas más sinceros e íntimos, en un momento en que todo el mundo enfoca su atención en Pyongyang adonde han llegado los mensajeros de amistad desde Rusia.
Este es un acontecimiento trascendental, dijo y agregó que se sentía muy honrado por el orgullo de haber viabilizado con el sentido de responsabilidad como Presidente de Asuntos Estatales de la RPDC, junto al Presidente Putin, ese acontecimiento político de gran peso y connotación estratégicos para los dos excelentes pueblos, el presente y el futuro.
Apuntó que gracias a la firma del tratado las relaciones bilaterales han alcanzado la nueva etapa superior de la alianza, que con ella se preparó el marco legal que permite realizar el gran proyecto de las dos Direcciones estatales y el anhelo del siglo de sus pueblos de construir un Estado poderoso preservando firmemente la situación de la estabilidad regional y global conforme a los intereses comunes.
Apreció que mediante el fomento de la cooperación en varias esferas como la política, la economía, la cultura y la defensa se ha logrado un desarrollo más formidable de largo alcance que contribuye al progreso y bienestar de ambos países.
Quisiera subrayar en particular que el nacimiento del tratado más efectivo en la historia de las relaciones Corea-Rusia es inconcebible sin la previsión excepcional, gran resolución y voluntad del compañero Putin, amigo íntimo del pueblo coreano, expresó.
En este momento y en este lugar la gran alianza Corea-Rusia, un gran viraje en el desarrollo de las relaciones bilaterales, ha levado anclas y anuncia que se hace a la mar, acotó y afirmó que el gobierno coreano será siempre fiel a su compromiso del tratado en todo el proceso ulterior para desarrollar sin cesar la asociación estratégica e integral y la alianza indestructible.
Calificó el tratado de muy constructivo, de gran perspectiva, amante a la paz, de carácter defensivo y consagrado a fomentar y salvaguardar los intereses elementales de los dos pueblos para fomentar y defender los intereses fundamentales de los pueblos de dos países. Y afirmó que sin duda alguna será un motor que acelera la construcción de un nuevo mundo multipolar y libre de la dominación, subyugación, hegemonía y despotismo.
Declaró solemnemente la invariable posición del gobierno coreano de que no habrá la menor diferencia en la interpretación ni vacilación alguna en cumplir todas las tareas históricas en aras del desarrollo eterno de la amistad de los pueblos y las generaciones venideras de los dos países y el fomento de su bienestar y en ser fiel a la obligación de superar con esfuerzos comunes cualesquier complejidades y vicisitudes, que han afrontado ya y encararán ambos países.
Putin dijo que tradicionalmente Rusia concede prioridad al desarrollo de relaciones con Corea de carácter amistoso y acumuló durante varios decenios grandes experiencias de desarrollo de la cooperación mutua en distintos sectores.
Afirmó que el tratado bilateral firmado es el documento prácticamente arremetedor que recoge la aspiración de ambos países de elevar sus relaciones al nuevo nivel cualitativo sin limitarse a la altura ya alcanzada.
Prosiguió que tanto Rusia como Corea practican la política exterior de carácter independiente sin perdonar el lenguaje de chantaje e imposición y rechazan de hecho la aplicación de las sanciones y medidas restrictivas por motivos políticos.
Seguirán enfrentándose a la acostumbrada campaña de sanción y aplastamiento del Occidente para mantener su hegemonía en la política, la economía y otras esferas, subrayó y continuó que en este contexto, deben ser reexaminadas las medidas restrictivas indefinidas contra la RPDC que mantiene el Consejo de Seguridad de la ONU, instigado por EE.UU. y sus satélites.
La causa raigal de la agravación de situación tensa de la Península Coreana reside en la política conflictiva de EE.UU. que aumenta la dimensión e intensidad de los ejercicios militares con la participación de países hostiles a la RPDC como la República de Corea y Japón, reveló Putin y afirmó que Rusia no tolerará nunca el intento de imputar a la RPDC la responsabilidad del empeoramiento de la situación.
Prosiguió que la RPDC tiene el derecho a potenciar su capacidad de defensa nacional, preservar la seguridad nacional y defender la soberanía y que Rusia está dispuesta a seguir realizando esfuerzos políticos y diplomáticos por eliminar el peligro de repetición del conflicto armado en la Península Coreana y formar una duradera estructura de paz y estabilidad en esta región a base del inseparable principio de seguridad.
El pacto suscrito hoy tiene previsto ofrecer ayudas mutuas en caso de que uno de sus signatarios sea agredido, apuntó y acentuó que Rusia no descarta la cooperación técnico-militar con la RPDC según lo estipulado en el documento.
Expresó la confianza en que las conversaciones de ese día harían aporte a la amistad Rusia-Corea, el desarrollo de sus relaciones de socios y el afianzamiento de seguridad de todas las regiones y transmitió una vez más su agradecimiento a Kim Jong Un y todos los amigos coreanos por el agasajo dispensado a él y la organización de las labores conjuntas provechosas.
Ambos mandatarios expresaron el deseo de que la presente ceremonia de firmas sirviera de ocasión importante que prometa un futuro luminoso de los dos pueblos más firmes e inteligentes del mundo como una opción estratégica cuya importancia será cada vez más evidente y relevante junto con el cimiento eterno de desarrollo posterior de relaciones bilaterales.
La poderosa unidad camaraderil y amistad combativa entre la RPDC y Rusia, desarrolladas notablemente como relaciones estratégicas integrales y alianza indestructible de la nueva época gracias a la destacada y enérgica dirección de sus mandatarios, manifestarán plenamente a todo el mundo su gran vitalidad estimulando la lucha de la humanidad progresista por un nuevo mundo justo y pacífico.