Función del ballet “Belleza durmiente del bosque”

Tuvo lugar el día 20 en el Teatro de Arte Mansudae la función del ballet “Belleza durmiente del bosque” que ofrece el conjunto artístico de la filial del Teatro Mariinsky en el Territorio Litoral de Rusia.

La disfrutaron el ministro de Cultura de la República Popular Democrática de Corea, Sung Jong Gyu, los funcionarios de los ministerios, órganos centrales y sectores interesados, los artistas y los profesores y estudiantes de la rama de educación de arte, así como los miembros de la delegación del territorio litoral de la Federación Rusa, encabezada por el gobernador de la Administración del Territorio Litoral, Oleg Kozhemyako, y la otra del Ministerio de Cultura de la FR, presidida por su viceministro Andrei Maluishev, el embajador Alexandr Matsegora y otros integrantes de la embajada rusa en Corea.

Fueron invitados los miembros del Cuerpo Diplomático en Corea.

Antes de la función, Oleg Kozhemyako y Andrei Maluishev pronunciaron las palabras de felicitación.

Ellos dijeron que esta función ha sido posible gracias a la profunda atención del Presidente de Rusia, Vladimir Vladimirovich Putin, y el Presidente de Asuntos Estatales de la RPDC, Kim Jong Un.

Recordaron que el estimado compañero Kim Jong Un presenció la misma obra de ballet durante su visita a Vladivostok en el año pasado.

Subrayando que durante 75 años pasados después de la firma del acuerdo sobre la cooperación económica y cultural Rusia-Corea, se hizo más sólida la amistad Rusia-Corea, expresaron la convicción de que esta función será un hito importante para el intercambio cultural entre los dos países y el desarrollo de relaciones bilaterales.

Conservando el grato recuerdo de haber actuado en presencia del estimado compañero Kim Jong Un, los ejecutantes interpretaron con movimientos elegantes y delicados y habilidades de arte el ballet “Belleza durmiente del bosque” que vale ser estimado como obra representativa de Rusia en este género de baile.

Los espectadores entregaron ramos de flores y aplaudieron fuertemente a los bailarines rusos que causaron una impresión profunda con el atractivo singular del ballet.

Se les trasladaron también los cestos florales de felicitación.