Los niños escolares de la ciudad de Pyongyang concurren a varios centros extraescolares y culturales aprovechando las vacaciones invernales.
En los pabellones de ciencias básicas, sueños de niños e historia de desarrollo científico-técnico del Palacio de Ciencias y Tecnología, centro de divulgación científico-técnica y docente, los alumnos estudian con afán abrigando el sueño de ser científicos e inventores del futuro.
Y en el Museo de Historia Natural, localizado al pie del monte Taesong, los estudiantes se ensimisman en el mundo de la naturaleza, en los pabellones de espacio cósmico, seres vivientes fosilizados, animales, plantas, etc.
En los centros de la vida cultural y emocional acondicionados por doquier de la capital se ven los estudiantes que pasan de modo alegre las vacaciones.
Forjan el cuerpo y alma practicando el deporte sobre el hielo en el centro de patinaje al aire libre recién acondicionado, la natación, el voleibol, la escalada y otras actividades deportivas en el Complejo de Piscinas de Recreación de Munsu.
En la sala de videojuegos y la casa de espejo que tiene introducida la técnica de realidad virtual del Parque de Recreo del Pueblo Rungna, se oyen incesantemente los gritos de alegría de los niños escolares que se divierten.
Mediante diversas actividades extraescolares, los estudiantes adquieren multifacéticos conocimientos sobre la naturaleza y sociedad y se preparan como fidedignos trabajadores del futuro, dotados de alta capacidad creativa y robusta constitución física.