Comunicado de la KFA

Recientemente, la RPD de Corea ha declarado la victoria nacional frente a la pandemia del coronavirus. Con
cientos de miles de infectados y apenas 74 fallecidos, debido al cierre del país y las medidas preventivas, así como
la movilización de personal sanitario civil y militar, se logró detener la catástrofe.

La pregunta de cómo pudo entrar el coronavirus en la República, considerando que se tomaron las medidas más
estrictas de todo el mundo desde el 2020, propició una investigación detallada que arroja la siguiente
información:

“El comité de investigación llevó a cabo una investigación y un análisis multifacético, anatómico y a gran escala
en Ipho-ri, condado de Kumgang, de los factores que bien podrían servir como una ruta de entrada del virus.
Con base en los hallazgos, descubrió el hecho de que un soldado de 18 años y un niño de 5 años tocaron los
objetos respectivamente, que fueron esparcidos por globos de Corea del Sur en las colinas cercanas a los
cuarteles y la zona residencial.

Dadas sus características clínicas, vínculos epidemiológicos y resultados de pruebas de anticuerpos, el comité de
investigación finalmente corroboró el hecho de que Ipho-ri, condado de Kumgang, provincia de Kangwon, que
limita con Corea del Sur, es el mismo lugar donde el virus maligno entró por primera vez en nuestro país y que
tal afluencia fue causada por el contacto con folletos y otros objetos contaminados por el virus aerotransportado
de Corea del Sur.

En mayo de 2020, la OMS publicó un informe en el que se confirmó que el nuevo coronavirus puede sobrevivir
hasta 7 días en la superficie de la mascarilla, 4 días en acero inoxidable y plástico y 2 días en vidrio. Subrayó la
importancia de la desinfección de las superficies dado que no se puede descartar una posible infección por
coronavirus a través del contacto con objetos. Según los datos publicados en todo el mundo de febrero a marzo
de 2022, el virus “Ómicron” sobrevivió entre 6,4 y 9,8 días en plásticos (8,1 días en promedio), 7 días en acero
inoxidable y superficies de vidrio, 2 días en telas y 30 minutos en papel. En marzo de 2022, una agencia de prensa
de Corea del Sur informó que prestigiosos institutos universitarios de investigación en Francia, Japón y Hong
Kong confirmaron sobre una base científica que el virus sigiloso “Ómicron” puede sobrevivir en la superficie de
los objetos de 2 a 5 veces más que el virus original y otras cepas (Como la Alfa, Beta, Gamma y Delta). La
Universidad de Michigan anunció que se detectó el virus en el 1,4 por ciento de las muestras después de analizar
totalmente más de 500 muestras de superficies este año. Prestigiosos académicos de los EE. UU., incluido un
profesor del Instituto de Tecnología de Virginia, afirmaron que la propagación del virus a través de las superficies
y las manos debe evitarse lavándose las manos, advirtiendo sobre el peligro de propagación del virus a través
de las superficies. En particular, desde finales de marzo hasta principios de abril de 2022, Beijing, Shaoxing de la
provincia de Zhejiang, Changzhou de la provincia de Jiangsu y Dalian de la provincia de Liaoning, China, llevaron
a cabo una investigación sobre las personas infecciosas confirmadas localmente como positivas al virus sigiloso
Ómicron”. Como resultado, afirmaron que el virus se transmitió a través de la ropa importada de Corea del Sur
y tomaron medidas para fortalecer la cuarentena y desinfección de los productos importados de Corea del Sur”.

El único foco donde pudo infiltrarse la pandemia, fue, pues, a través de los globos de Helio con dinero, pornografía
y propaganda enviada por los servicios secretos surcoreanos y sus organizaciones no gubernamentales que
actúan como tapadera para sus crímenes.

La repetida campaña de propaganda con globos representa una invasión del espacio aéreo de la RPD de Corea.
Y el envío de material contaminado equivale a un ataque biológico.
Corea del Sur debe pedir disculpas por esta acción y paralizar la intrusión en el espacio aéreo de la RPD de Corea
de inmediato.

Los criminales deben recordar las advertencias y la lección de la isla Yonpyong. La RPD de Corea tiene todo el
derecho de preservar la vida de su población e integridad de su territorio, destruyendo de forma inmediata
todos los lugares de lanzamiento de globos contaminados con el virus.