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“Hasta ahora no se me olvida el día en que el barco de emergencia llegó primeramente a nuestra aldea y acudimos a la orilla del lago y dimos ¡vivas! a toda voz. Desde entonces suena la sirena agradable del barco en nuestra localidad” -dijo un anciano que vive en la comuna Onyang del distrito Nyongwon de la provincia Phyong-an del Sur.
En la tierra de Nyongwon, llamada primera aldea debajo de la capa del cielo, se levantó la Central Hidroeléctrica Taedonggang a principios de la década de 1980. Así apareció un extenso lago artificial, digno de ser llamado como “mar entre montañas”.
De sus aguas se benefició en gran medida el distrito para el desarrollo de su economía y la mejora de la vida de sus pobladores. Pero algunas aldeas muy apartadas, se vieron obligadas a cruzarlo en barco para ir al hospital.
El Gobierno aseguró el barco de emergencia para el tratamiento médico y la prevención de enfermedades de los habitantes de estas aldeas montañosas. Cuando aparece un enfermo, el médico de la clínica comunal, además de comunicar al hospital popular del distrito, lo visita a bordo de dicho barco.
Esta embarcación continúa invariablemente la navegación destinada al fomento de la salud de la población visitando las aldeas montañosas apartadas a orillas del lago.
