El estimado compañero Kim Jong Un recibió una carta que le dirigiera el día 3 la Asociación General de Coreanos Residentes en China.
La misiva señala que se acoge con alegría el 30º aniversario de la fundación de la Asociación General de Coreanos Residentes en China cuando todos los habitantes de la patria dan grandes pasos en la marcha general hacia una nueva victoria de la construcción socialista con gran emoción y alegría por haber enaltecido de nuevo al Mariscal Kim Jong Un como líder del Partido del Trabajo de Corea.
La historia de 30 años de la asociación es la de noble fraternidad del Presidente Kim Il Sung, el Dirigente Kim Jong Il y el Mariscal Kim Jong Un, que inspiraron la dignidad y orgullo de la nación coreana a los compatriotas radicados en el extranjero y les atienden con afecto paternal, y la de fidelidad y patriotismo de estos últimos que siguen emprendiendo la vía de amar a la patria y la nación confiando su destino y futuro en la patria socialista.
Apunta que el afecto de los grandes hombres sin iguales, que continúa en el transcurso del tiempo hasta en el territorio foráneo, ha sido el rayo del gran Sol que brilla siempre tanto en los días alegres como en los penosos.
Bajo la guía del gran Sol, nuestra asociación vino fortaleciéndose y desarrollándose durante los pasados 30 años como organización patriótica que dispone de sucursales regionales y de otros tipos, la Asociación de Económicos Coreanos Residentes en China, la Asociación de Jóvenes Coreanos Residentes en China y otras entidades, que agrupan a muchos coreanos residentes en China de diferentes sectores, y sus miembros aman cálidamente la patria socialista y luchan con abnegación por reunificar la patria, precisa.
Prosigue que los funcionarios de la asociación y todos los coreanos residentes en China están firmemente decididos a acatar con fidelidad la dirección del Mariscal teniendo como principio filosófico de la vida la verdad de que en el camino de seguir a los grandes hombres sin iguales del Paektu, hay la dignidad y orgullo de la nación de Kim Il Sung y la felicidad y futuro eternos de los ciudadanos de la Corea socialista en el extranjero.
Expresa la decisión de acelerar el movimiento patriótico para contribuir de modo particular a la prosperidad de la patria madre marcando los pasos con el pueblo de la patria que avanza vigorosamente para alcanzar la meta del primer año del nuevo Plan Quinquenal, según el proyecto maravilloso presentado en el histórico VIII Congreso del PTC y el segundo Pleno del VIII Período de su Comité Central.
Finalmente, la carta desea buena salud al estimado compañero Kim Jong Un, Sol eterno y generoso padre de la nación coreana, recogiendo el deseo unánime de todos los compatriotas radicados en China.