Frente a la escalada de la transmisión de la COVID-19 y de su peligrosidad, las direcciones profilácticas de emergencia a todos los niveles dan prioridad a hacer entender a las masas que los fenómenos de descuido, indiferencia y cronicidad y el alivio prematuro de las medidas profilácticas pueden causar una crisis inimaginable, irreparable y fatal.
Todas las regiones y unidades están movilizando los medios de propaganda y agitación para que los ciudadanos y empleados rechacen los fenómenos de indolencia y relajación.
Las zonas fronterizas y las aledañas a la Línea de Demarcación Militar y las costeras prestan atención especial al control, vigilancia y esterilización para bloquear a tiempo hasta la mínima posibilidad de entrada de virus.
Se intensifican la educación y la supervisión epidemiológica sobre los pesqueros para impedir completamente la ruta de transmisión de pandemia por vía marítima y se perfeccionan la disposición y la base material-técnica para responder de inmediato a cualquier situación de emergencia.
Se ha establecido el sistema estatal de información profiláctica de emergencia a fin de garantizar satisfactoriamente la prontitud y conformidad de la labor profiláctica y se observa el principio de trabajo audiovisual en todas las unidades.
Los funcionarios profilácticos de la provincia de Hamgyong del Sur realizan con responsabilidad la esterilización y el chequeo médico sobre los moradores y los ayudantes voluntarios al campo y hacen ingentes esfuerzos por proveerse de suficientes materiales necesarios a la profilaxis.
La provincia de Phyong-an del Norte se enfrasca en la reparación de las instalaciones de esterilización de agua potable y de la depuración de aguas residuales.
El sector de enseñanza toma las medidas estrictas para que se implemente según la demanda profiláctica la vacación veraniega en las instituciones docentes del país.
Todas las unidades del país prestan atención a la implementación perfecta de las benevolencias estatales a favor de las trabajadoras con niños