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El 25 de junio de 1950, el imperialismo norteamericano perpetró la agresión armada a la RPD de Corea. La guerra era una severa prueba para el pueblo coreano que llevaba menos de cinco años desde que fue liberado (agosto de 1945) de la dominación militar del imperialismo japonés. Solo hacía menos de dos años que se fundó la República (septiembre de 1948) y poco más de dos que el ejército se convirtió en la fuerza armada regular (febrero del mismo año).
Ante esta coyuntura extraordinaria que determinaba el destino de la patria, el pueblo coreano se movilizó como un solo hombre, bajo la consigna “¡Todo por la victoria en la guerra!”.
Solo en tres o cuatro días desde el inicio de la contienda, se ofrecieron a ir al frente más de 80 mil jóvenes, estudiantes y trabajadores del país.
La Información Central de Corea, fechada el primero de julio, Pyongyang, transmitió así: “Los estudiantes de ambos sexos de la Universidad Kim Il Sung y otros institutos superiores, escuelas especiales, secundarias altas, e innumerables jóvenes trabajadores de las fábricas, minas, empresas y aldeas rurales del país pidieron acudir al frente.
Su número ya llega a 81 858.”
Una vez en el frente, los combatientes del EPC aniquilaron sin piedad a los enemigos en las batallas enarbolando en alto la bandera nacional.
La clase obrera de la industria militar produjo el armamento manejando las máquinas sin relevo. Los trabajadores de las fábricas, empresas y granjas desplegaron diversos movimientos de emulación por el aumento productivo y la lucha por el aumento de producción de cereales en tiempo de guerra.
Por otra parte los pobladores de las zonas cercanas del frente ayudaron activamente a los soldados que defendían las cotas 1211, 351, el monte Wolbi, etc., ora rehabilitando varias veces al día las carreteras y los puentes destruidos por el bombardeo de los aviones enemigos, ora transportando a espaldas los alimentos, obuses y municiones cuando se cortó el corredor de abastecimiento al frente.
Gracias al movimiento de donación de fondos para armas se enviaron al frente muchos aviones, tanques y buques de guerra denominados “Obrero”, “Unión de Juventud Democrática de Corea”, “Estudiante”, “Niño”, etc.
También muchos escolares y niños incluyendo los miembros de las vanguardias infantiles y destacamentos de autodefensa de niños denominados con diversos nombres lucharon con valentía contra los invasores que ocuparon su tierra natal.
En la defensa de la patria todo el pueblo coreano se hizo soldado y defensor.
En la Guerra de Liberación de la Patria que duró tres años (el 25 de junio de 1950-el 27 de julio de 1953), surgieron 533 Héroes de la República (incluyendo cinco doble héroes) y 16 Héroes del Trabajo.
