Se hace cada día más fuerte la ira por los traidores que se atrevieron a ofender nuestra dignidad suprema y a todo el pueblo coreano.
Reflejando la opinión pública indignada, se impulsan a buen ritmo en diferentes localidades del país los preparativos para lanzar panfletos contra los tipejos surcoreanos faltos de moral.
Se imprimen las octavillas a lanzarse sobre la cabeza de las autoridades surcoreanas que durante el bienio pasado vinieron infringiendo con retórica dulce la aspiración y esperanza de todos los coreanos reflejadas en los acuerdos Norte-Sur.
Los folletos de acusación revelan en detalles los crímenes de las autoridades surcoreanas que rompieron los vínculos íntercoreanos y han abandonado por la población por el servilismo a EE.UU.
Los estudiantes de las universidades a todos los niveles del país están dispuestos para desarrollar la campaña de lanzamiento de volantes inmediatamente después de ser permitidos la apertura y el avance a las zonas del frente, según la tramitación correspondiente.