Un 19 de abril de hace 71 años, se inauguró en Pyongyang la Conferencia Conjunta de los Representantes de los Partidos Políticos y las Organizaciones Sociales del Norte y el Sur de Corea como primera reunión nacional en la historia desde la división, acaparando gran esperanza y atención de todos los coreanos.
Después de la liberación del país (15 de agosto de 1945), la Península Coreana se encontraba en la crisis de división nacional debido a las maniobras de las fuerzas extranjeras.
En tal circunstancia, el Presidente Kim Il Sung presentó la propuesta trascendental de convocar la Conferencia Conjunta Norte-Sur para levantar un Estado unificado democrático e independiente.
Envió a los funcionarios a los representantes y personalidades de los partidos políticos y entidades sociales del Sur de Corea para que les informaran la política y orientación del partido sobre el frente unido y las negociaciones Norte-Sur.
Aclaró su posición de lograr la unidad con todos los partidos políticos, entidades sociales y personalidades que apoyaban la reunificación de la patria, por encima de sus criterios políticos y creencias religiosas, y avanzar mano a mano con todos los que emprendían el camino patriótico arrepintiéndose de sus culpas antinacionales cometidas en el tiempo pasado.
Gracias a sus esfuerzos, se convocó la primera reunión pannacional abarcando a 56 partidos políticos y entidades sociales de ambas partes coreanas.
En el cónclave, el Presidente presentó el informe histórico “Situación política de Corea del Norte”, en el cual enseñó las medidas para la reunificación independiente y pacífica de Corea.
Los participantes aprobaron unánimemente el informe describiéndolo como “advertencia imponente sobre la crisis de la patria” y “nueva guía que ilumina la ruta de avance de la nación”.
Un escritor estadounidense de aquel entonces dijo que en la Conferencia Conjunta “Participaron casi todas las figuras renombradas surcoreanas, excepto Syngman Rhee”.