En relación con que la RPDC no puede auspiciar la asamblea regional del Sudeste Asiático de la Organización Mundial de la Salud (OMS) debido a la conducta injusta del comité de sanción anti-RPDC del Consejo de Seguridad de la ONU, el representante permanente de la República Popular Democrática de Corea ante la ONU, Kim Song, envió el día 11 una carta al secretario general de la ONU, Antonio Manuel de Oliveira Guterres.
En la 71ª reunión de la asamblea regional del Sudeste Asiático de la OMS, efectuada en la India en septiembre del año pasado, los países miembros aprobaron por unanimidad la resolución de celebrar en septiembre de 2019 en la RPDC la próxima reunión, recuerda la misiva y continúa:
Pero, el comité de sanción anti-RPDC del CS de la ONU prohibió la introducción al país sede de los equipos electrónicos necesarios para la reunión, imposibilitando así la apertura de ella en la RPDC, lo que es un estado anormal sin precedentes en la historia de la OMS.
Las sanciones anticoreanas devienen obstáculos no sólo en las actividades de cooperación humanitaria de las organizaciones internacionales con la RPDC, sino también en la convocación de la cita internacional que es una actividad ordinaria de la OMS cuya misión principal es asegurar la vida y la salud de la gente.
Las “resoluciones de sanción” anti-RPDC del CS de la ONU, que no permiten hasta la introducción de computadoras y otros equipos electrónicos que hoy en día se utilizan ampliamente en la sociedad y las familias, constituyen un acto antiético que destruye la civilización moderna y lleva el mundo a la tenebrosa época medieval.
Los hechos demuestran nítidamente en qué grado llegó la sanción contra un país miembro de la ONU.
La ONU debe revisar, aunque sea ahora, todas las “resoluciones de sanción” anti-RPDC, que contravienen a la situación actual y la opinión pública mundial, y tomar las medidas correspondientes.