Acto por el aniversario del deceso de KIM JONG SUK.

Tuvo lugar el día 22 en Pyongyang con la participación de los cuadros del Partido y el gobierno, los funcionarios del Comité Central del Partido del Trabajo de Corea, ministerios, órganos centrales y organismos de fuerzas armadas, los profesores, empleados y alumnos de la Escuela Revolucionaria de Mangyongdae, y los funcionarios y beneméritos de las instituciones, fábricas y empresas de esta capital.

El discurso de condolencia estuvo a cargo de Pak Kwang Ho, miembro del Buró Político y vicepresidente del Comité Central del Partido del Trabajo de Corea, quien señaló en particular:

Nacida en una familia patriótica y revolucionaria, la Heroína emprendió en su adolescencia la lucha revolucionaria y dedicó toda su vida en aras de la patria, el pueblo y la victoria de la revolución, con infinita fidelidad al General Kim Il Sung.

En el período de la Lucha Armada Antijaponesa, mostró su valentía sin par, incorporada a la unidad dirigida personalmente por él, e hizo extraordinaria contribución para lograr la causa histórica de liberación de Corea mediante sus deslumbrantes actividades militares y políticas.

Después de la liberación nacional, hizo gran aporte a fundar el Partido, las fuerzas armadas regulares y la República en acato a la línea que el gran Líder planteó de la construcción de una nueva patria, y asegurar la firme continuidad de la causa revolucionaria del Juche.

Desarrolló por su firme y constante concepción del líder revolucionaria, por su espíritu de sacrificio y abnegación dedicados a la causa de él.

La más leal de los soldados más leales al General Kim Il Sung, fue una auténtica hija y servidora fiel al pueblo que tomó y puso en práctica ejemplo de él, espejo de las cualidades populares infinitamente sencillas.

Dio nacimiento a la Estrella Luz del monte Paektu s(e refiere al futuro Dirigente Kim Jong Il) en medio de la tempestad violenta de la revolución y hasta en sus postrimerías se dedicó por entero a prepararlo como el futuro sucesor del General, que en la idea, audacia y cualidades se identificaba totalmente con éste.

El orador destacó que serán eternas juntos con la sagrada historia de la Corea de Juche las proezas de la Heroína, quien permitió al pueblo coreano disfrutar la fortuna de tener a un gran Hombre como su líder, de generación en generación.